Es todo un símbolo para los zaragozanos y la ciudad de Zaragoza: el Mercado Central nos ha enseñado que comprar local y de cercanía es tan sencillo como perderse en sus pasillos. ¡Y ahora nos da otra lección! Según se puede leer en Heraldo de Aragón o El Periódico de Aragón, el mercado tiene una serie de problemas de climatización que, por fin, va a resolver con una de las mejores herramientas para ello: 126 nuevas ventanas motorizadas.
Las noticias apuntan a que ha costado dos años tener claro no solo cómo resolver este problema de frío y calor, sino que también era necesario dar con un proyecto que respondiera a las exigencias estéticas y patrimoniales de una joya de la ciudad.
¿Y qué sabemos de las nuevas ventanas del Mercado Central?
Lo más importante es que las nuevas ventanas del Mercado Central de Zaragoza responderán a las altas exigencias del emplazamiento. Es decir, se hará exactamente lo mismo que nosotros ponemos en práctica con cualquier cliente particular. La geometría será perfecta, le sentarán como un guante y, de cara a respetar a la estética del edificio, sus perfiles y marcos pasarán «desapercibidos», según informa Heraldo de Aragón.
Sabemos que serán de apertura paralela, un sistema que ahorra bastante espacio allí donde se instala porque evita abrirlas hacia los lados y que, en el caso de este particular emplazamiento, eliminarán una serie de reflejos con los que buscaban terminar.
En el plano tecnológico, llega lo que más nos fascina: se conectarán con el sistema contra incendios del propio mercado y estarán motorizadas para que solo con pulsar un botón se puedan abrir o cerrar en función de las necesidades del momento.
¿Y por qué ha sido necesario buscar las mejores ventanas para el mercado?
La respuesta la han dado los detallistas que hacen su trabajo diario en el interior, y si has cambiado de ventanas en tu casa recientemente te sonará: la temperatura ha sido el motivo principal. En verano se quejan de pasar mucho calor y en invierno de sufrir en exceso el frío. Mantener una temperatura de confort es importantísimo no solo para los clientes que hacen la compra (y lo mismo decimos para los habitantes de una casa), sino para mantener bajo control las facturas eléctricas y, sobre todo, para controlar los consumos en un nivel sostenible también para el medio ambiente.
En cuanto la obra finalice, que todavía no fecha cerrada, ni será en un día y sin obras como haríamos nosotros en tu casa, el problema del confort térmico desparecerá y saldrán ganando trabajadores y usuarios del Mercado Central.
Los que tienen actualmente un puesto abierto en su interior lo resumen muy bien: sus nuevas ventanas les harán entrar por fin en el siglo XXI.