¡Abre tus ventanas! Con más razón que nunca. Nosotros, que somos de Zaragoza, somos perfectamente conscientes de que el invierno no es precisamente la estación que más se presta a ello, pero los expertos lo tienen claro: el coronavirus no es amigo de las corrientes de aire y de los espacios ventilados. Así que hazles caso y, cuando no te quede más remedio que estar en espacios cerrados, asegúrate de que están ventilados correctamente o que tienen sistemas para renovar el aire continuamente.
Índice del artículo
El Covid y el aire
La evidencia científica más reciente asegura que al virus le gusta moverse especialmente bajo techo. Los espacios cerrados se han transformado en el principal caballo de batalla de los científicos que se han desgañitado por decirle al mundo que la correcta ventilación es fundamental, y que dentro de espacios cerrados no deberíamos quitarnos las mascarillas con la ligereza que lo hacemos a veces. En cierta parte es normal: en algunos sitios, valga como ejemplo la casa de unos familiares, nos sentimos mucho más seguros y no tenemos la sensación de que nos puedan contagiar ahí.
¿Qué tiene que ver el aire en todo esto? Vamos con algunos datos que hemos recabado sobre el contagio:
- Una de las principales vías son las superficies, por eso es tan importante la desinfección y tener las manos impecables.
- Luego están las gotículas que, atendiendo a la información divulgada por José Luis Jiménez, uno de los mayores expertos del mundo en aerosoles, las expulsamos al hablar (o cantar, estornudar, etc.) y son especialmente peligrosas si aterrizan en ojos, nariz o boca. Las comparan con proyectiles: si no dan en la diana se caen al suelo.
- La tercera vía, la que de verdad ha sido objeto de polémica, son los famosos aerosoles. Estas partículas se quedan suspendidas en el aire y las podemos inhalar. Hazte a la idea de que son como el humo del tabaco, que lo puedes respirar y oler durante muchos minutos después.
¿Y qué se puede hacer en los espacios cerrados?
Pues aplicar la teoría alemana, y la de otros tantos científicos: ¡abrir las ventanas y dejar que corra el aire! Literalmente. Si durante el confinamiento tus ventanas se convirtieron en punto de reunión para tener algún contacto social, ahora este elemento de tu casa (y de colegios, bares, edificios públicos, etc.) vuelve a convertirse en protagonista. En Alemania, como ya te hemos mencionado, la recomendación de que los espacios estén correctamente ventilados no ha sido un simple consejillo: tiene el rango de consideración oficial. Saben que llega el frío, pero también que los espacios ventilados acumulan menos CO2 y menos partículas contaminadas que puedas respirar.
Así puedes ventilar correctamente
- Lo importante no es solo abrir ventanas, es crear corrientes. Por eso las puertas también juegan un papel crucial y hay que abrirlas igualmente.
- Lo habitual es hacerlo en pequeños ciclos a lo largo del día, pero ahora puedes tener contigo un medidor de CO2 y así saber cuando necesitas hacerlo. Igual no hace falta tener todas las ventanas abiertas de par y par y dejando una pequeña abertura es suficiente. El medidor te lo confirmará.
- Las habitaciones en las que duermes siempre es adecuado hacerlo al despertar, puesto que la concentración de CO2 es más elevada tras pasar toda la noche sin ventilación.
- A todo ello se puede añadir la figura de los humidificadores. Aunque todavía está cogida con la teoría, todo parece apuntar que consiguen mantener las partículas muchos menos tiempo en el aire.
¿Y allí donde no puedes ventilar?
José Luis Jiménez lo tiene claro: la solución son purificadores de aire con filtros HEPA, o incluso soluciones un poco más artesanales como ventiladores corrientes a los que añades un filtro. ¡Y no lo olvides! Cualquier medida de ventilación nunca sustituirá a la mascarilla (bien pegada a la cara, sin huecos), la distancia y la higiene de manos. Todas ellas medidas que, por supuesto, hacemos cumplir en nuestra tienda cuando vienes a elegir las próximas ventanas que usarás para ventilar correctamente tu hogar.