No te contamos nada nuevo si te decimos que las ventanas son elementos esenciales en cualquier vivienda. Por ellas pasa la luz natural, nos permiten ventilar correctamente y vemos el exterior. Sin embargo, tampoco sorprendemos al decir que no todas las ventanas son iguales y que, por supuesto, se componen de una serie de elementos que hacen únicas. ¿Sabrías identificar todas las partes de una ventana? Si has llegado hasta aquí por ello, tranquilo que en Cerramientos Integrales te hacemos una síntesis.
Respecto a los componentes de una ventana, te diremos que se pueden clasificar en partes fijas y móviles. Es decir, aquellas que no se pueden abrir ni cerrar, y que forman la estructura de la ventana y, por otro lado, las que se pueden manipular para regular el paso de la luz o el aire. Para hacer algo más sencilla la explicación, vamos a centrarnos en las ventanas exteriores fijas y en las correderas, modelos que cuentan con todas las partes generales que pretendemos explicar.
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Partes de una ventana exterior fija
Las ventanas exteriores fijas son, como bien dice el nombre, aquellas que no se pueden abrir ni cerrar, sino que permanecen siempre en la misma posición. Estas ventanas tienen la ventaja de ofrecer una mayor superficie acristalada, además de permitir muy bien el paso de la luz natural. Todo ello sin perjudicar el aislamiento térmico y acústico.
Las partes de una ventana exterior fija que consideramos los más importantes son:
- El marco: es la estructura que sostiene el vidrio y lo fija al hueco de la pared. Puede ser de diferentes materiales, como el PVC o el aluminio. El marco debe ser resistente, duradero y estético, así como tener un buen aislamiento térmico y acústico. Técnicamente, es lo que conocemos como perfil.
- El vidrio: es el elemento transparente que permite el paso de la luz y la visión del exterior. Puede ser simple, doble y hasta triple, además de tener diferentes características, como ser bajo emisivo, laminado, templado o tener protección acústica.
- El sellado: es el material que rellena el espacio entre el marco y el vidrio, y entre el marco y la pared. Su función es evitar filtraciones de aire, agua o ruido, así como mejorar el aislamiento térmico y acústico. El sellado puede ser de silicona, poliuretano, espuma o cinta adhesiva.
- Los accesorios: son los elementos complementarios que mejoran la funcionalidad o la estética de la ventana. Por ejemplo, los perfiles decorativos, las molduras, los tapajuntas o las persianas.
Partes de una ventana corredera
Por su parte, las ventanas corredizas o correderas son esas ventanas que se abren y cierran deslizando una hoja sobre otra. Son muy comunes en las viviendas modernas por su practicidad, estética y porque también ahorran espacio.
Este es un listado general de las partes que suelen tener:
- El marco: es el elemento que rodea el hueco de la pared donde se instala la ventana. Ya te lo hemos presentado en el apartado anterior.
- El rail: es el perfil horizontal inferior del marco, sobre el que se deslizan las hojas de la ventana. Tiene una forma de U invertida para alojar los rodamientos o ruedas que facilitan el desplazamiento de las hojas. Debe estar nivelado y limpio para evitar que se atasquen o se salgan del carril.
- El cabezal: diríamos que es la parte de arriba de las ventanas porque se trata del perfil horizontal superior del marco, que sirve de guía y soporte para las hojas de la ventana. Tiene una forma de U normal o doble, según el tipo de ventana. Debe estar alineado con el riel y tener una altura suficiente para permitir el paso de las hojas sin rozar.
- El montante: es el perfil vertical del marco, que separa las hojas de la ventana y las mantiene en su posición. Puede haber uno o dos montantes, según el número de hojas de la ventana. El montante debe estar perpendicular al riel y al cabezal y tener un grosor adecuado para evitar que las hojas se choquen entre sí.
- La hoja: es el elemento que se desliza sobre el riel y el cabezal, formando la superficie acristalada de la ventana. Está compuesta por un marco interno, un vidrio y un sistema de cierre. La hoja debe ser ligera y resistente, tener un buen aislamiento térmico y acústico y contar con un sistema de seguridad que evite su apertura desde el exterior.
- El rodamiento o rueda: es el mecanismo que permite el movimiento de la hoja sobre el riel. Consiste en una pieza cilíndrica o esférica que gira sobre un eje y que se inserta en el perfil inferior de la hoja. El rodamiento o rueda debe estar bien lubricado y ajustado al riel para facilitar el deslizamiento de la hoja sin ruido ni vibraciones.
- El tirador o manilla: también es posible que lo conozcas por “cremona”. Se trata del accesorio que se utiliza para abrir y cerrar la hoja de la ventana. Puede ser de diferentes formas y materiales, según el diseño de la ventana. Debe estar bien fijado al marco interno de la hoja y tener un tamaño y una posición cómodos para su manejo.
- El sistema de cierre: es el conjunto de elementos que aseguran la estanqueidad y la seguridad de la ventana cuando está cerrada. Puede ser de diferentes tipos, como pestillos, cerrojos, ganchos, imanes, etc. El sistema de cierre debe ser fácil de accionar desde el interior y difícil de forzar desde el exterior.
Como has podido ir viendo, las partes de una ventana son muchas y cada una tiene su función específica. Debemos aclarar que, por supuesto, hay algunas de las mencionadas que pueden estar solo en una tipología, en ambos o en cualquier otro tipo de ventana que podamos colocar en tu casa. Lo más importante es que ahora sí que puedes decir que sabes de primera mano cuáles son las partes de una ventana y puedes tener en consideración esta información para el día que te toque elegir las nuevas para tu casa. En cualquier caso, ¡no hace falta que lo aprendas de memoria! Nosotros siempre vamos a estar para asesorarte.